Seguimos recorriendo espacios de interés ambiental y cultural con el Taller Intercentros de Senderismo Urbano, que nos va a llevar en esta ocasión a un espacio muy peculiar, que aunque no está explícitamente en el término municipal de Madrid,se encuentra muy cerca. Hablamos de El Soto de la Juntas.
Este espacio tiene la singularidad de ser la desembocadura de nuestro Río Manzanares en el Río Jarama, de ahí su nombre de "Las Juntas". Desde aquí el Jarama buscará ya unos kilómetros más adelante en Aranjuez, nuestro río más largo en la Península Ibérica, el Río Tajo. La singularidad del Soto de la Juntas no sólo estriba en ver morir nuestro Manzanares en el Jarama, sino de otro fenómeno que por está zona se da con mucha frecuencia. Nos referimos a las lagunas de agua dulce que abundan bastante en kilómetros a la redonda. El origen de estas lagunas son en principio artificiales, ya que en la zona hay mucha presencia de canteras y extracciones de áridos para la construcción, que una vez abandonadas, han dado lugar en apenas 20 años, a que el agua de los ríos cercanos, sobre todo el Jarama, se vaya filtrando y creando lagunas que pasan a ser naturales y a tener un gran valor ambiental por su fauna y flora. Así, te puedes encontrar lagunas importantes que también visitamos en otra ruta el otoño pasado, como las laguna de El Soto, El Picón de los Conejos o la de El Raso en Velilla de San Antonio. O las Lagunas de las Madres o la más grande de El Porcal, en Rivas-Vaciamadrid.
En esta ruta pudimos ver sin embargo la laguna de El Campillo y la propia laguna de El Soto de las Juntas.
Así, el pasado 7 de Febrero, dedicamos un viernes más a recorrer está zona, para lo que establecimos la cita en la Estación de Metro de Rivas-Vaciamadrid (ojo no confundir con Rivas Futura o Rivas Urbanizaciones que son distintas) de la línea 9 de Metro. Comenzaréis pronto a comprobar el valor ambiental de la zona al observar la gran cantidad de nidos de cigüeña que hay al salir de esta estación. Desde allí nos dirigimos hacia el casco antiguo de Rivas-Vaciamadrid que está justo al lado, que todavía conserva un pequeño núcleo de casas pintoresco, que sin duda son el pueblo y el origen de esta conocida ciudad madrileña. En la misma plaza del pueblo puedes encontrarte indicaciones del Camino de Uclés y del Camino de Santiago que pasan por allí. El Camino de Uclés es un iniciativa interesante para las personas andarinas, ya que ha recuperado un camino de origen peregrino hasta el Monasterio de Santiago de esta localidad.
Una vez visitado el antiguo ayuntamiento nos dirigimos en dirección Este hacia el Parque de San Isidro que lo recorremos paralelos a la A-3 en dirección a Arganda, buscando las indicaciones de la Laguna de El Campillo, una de las lagunas más grandes y bonitas de la zona y que cuenta con un Centro de Educación Ambiental de la propia laguna, formando parte de la Red de Centros de Educación Ambiental de la Comunidad de Madrid.
Siguiendo la calle Piscina Maspalomas, nos encontraremos a nuestra izquierda y fuera del pueblo, con un camino interesante denominado Ruta de los Cantiles, que recorre los acantilados de Rivas sobre el Rio Jarama y desde podemos ver muchas de las lagunas antes descritas. Tenemos que venir un día a hacerla.
Antes de seguir la ruta y llegar a la Laguna de El Campillo, nos encontraremos con la antigua Estación de La Poveda del famoso Tren de Arganda. Hacemos referencia aquí a esta estación ya que gracias a una iniciativa ciudadana de apasionados del tren, el famoso trayecto de "el tren de Arganda que pita más que anda", se puede disfrutar en un breve recorrido de 4 km desde Arganda hasta esta antigua estación. Podrás además disfrutar del paisaje de la Laguna del Campillo gracias a la Asociación Vapor Madrid. Pinchad en este enlace y mirar los horarios y precios, ya que es muy pintoresco este tren histórico. Teníamos previsto una visita a esta zona en Marzo pasado, pero ya sabéis, la pandemia lo anuló. Pero dado las posibilidades, tendremos que volver.
Pasada esta estación que se ve tímidamente desde el camino, cruzamos el túnel de las vías del Metro y en este punto al que debemos volver, giraremos a la izquierda brevemente antes de seguir la ruta para ver dos cosas interesantes. La primera el famoso puente de Arganda. De hierro fundido e histórico por trayectos a nuestras vacaciones a la playa que nos hacia pasar por aquí, y por su valor estratégico en tiempos de la Guerra Civil.
Una vez visitado este puente tan hermoso sobre el Jarama, retomamos nuestros pasos hacia atrás y antes de volver al primer túnel, nos encontramos con otro túnel más pequeño a nuestra derecha al que merece la pena acercarse en apenas 100 metros, pues una vez cruzado el túnel al otro lado, nos ofrece una panorámica preciosa de la Laguna de El Campillo.
Volvemos a retomar nuestros pasos hasta el primer túnel donde nos desviamos y caminaremos en esta ocasión dirección Madrid, como si buscaramos la A-3 que vemos al fondo. Caminamos por la antigua nacional ya en desuso y con empedrado original para antes de llegar a la vía de servicio de la autopista que la vemos al fondo, a nuestra izquierda aparece una finca que debemos bordear por su derecha en busca de un camino pequeño que nos hará cruzar por debajo de la autopista para encontrarnos a nuestra izquierda al Río Jarama. El camino breve bajo la A-3 acaba trás un pequeño repechón, en una pista que seguiremos en dirección Oeste y que nos llevará hasta el aparcamiento que marca el acceso al Soto de las Juntas. Aunque merezca la pena realizar este rodeo por lo que hemos podido ver, este acceso se encuentra a apenas 500 metros de la estación de Metro desde donde salimos en línea recta y unido con una pasarela sobre la A-3 que no llega hasta el acceso al Soto. Tendremos que pedir a las autoridades que alarguen la pasarela, ya que sino, debes cruzar una vía de servicio, que aunque lleva poco tráfico, no deja de ser una vía de servicio.
Desde el acceso al Soto de las Juntas, todo es coser y cantar. Como la laguna del Soto se encuentra justo en medio de la desembocadura de los ríos, una vez dentro del propio Soto, puedes realizar la ruta para bordear la laguna y buscar "la Junta de los Rios" por la derecha o por la izquierda, ya que la ruta es circular y volverías al mismo sitio. Es decir al acceso del Soto.
Recorrer las orillas de ambos ríos mientras al otro lado tienes la laguna es muy curioso, y pese a que nuestros pobres ríos van a esa altura ya muy maltratados, merece la pena salir de la pista circular del Soto en su extremo por el pequeño camino que nod acercar a ver "la Junta de los ríos", donde nosotros hicimos un piscolabis. La laguna cuenta también en ambas orillas con observatorios de aves, que nos hará deleitarnos con los cormoranes, garcetas o garzas reales que son más de río y aguas con corriente, y los ánades reales, fochas, gallinetas, porrón chico que se adapta bien a aguas tranquilas, como las lagunas.
Para terminar la ruta, buscamos de nuevo el acceso al Soto buscando la otra orilla de la laguna para hacer la ruta circular. La idea era volver a Rivas por el camino por el que habíamos venido (el del puente y la laguna de El Campillo), pero el grupo decidió que si estaba tan cerca la estación en línea recta podíamos organizarnos en grupos de 5 y cruzar con mucha precaución el único carril de la vía de servicio que nos dejará en la pasarela sobre la A-3 y 500 metros más adelante, de nuevo en el punto de origen, ahorrándonos 2 kilómetros y medio de rodeo. Así lo hicimos con mucha precaución, y terminamos la ruta con la ya establecida costumbre de tomarnos un caña o un vino de despedida en el pueblo de Rivas, junto a la Estación.
En definitiva, una ruta muy asequible, bonita y curiosa, al alcance de cualquier.
Os dejamos como hicimos la ruta y un pequeño video de la ruta.
PARA VER EL VÍDEO PINCHA DEBAJO
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