MAYORES DE CHAMARTÍN: PASEA TU CIUDAD. Pinar y El Sotillo de Villaviciosa.

En otra aventura más de esta sección, Pasea tu ciudad, en esta ocasión volvemos al entorno del curso medio del río Guadarrama para realizar una ruta muy interesante y bonita, y muy cerca de Madrid. En esta ocasión visitaremos El Pinar y el Sotillo de Villaviciosa de Odón.

Esta ruta que hoy os traemos, se realizó el pasado 28 de Febrero, y curiosamente fue la última ruta que hicimos justo antes del confinamiento.

El grupo como siempre tuvo su cita en el Intercambiador de Transportes de Príncipe Pío, donde tomamos la línea de autobús 518 que nos llevará en apenas media hora, a Villaviciosa de Odón. Una vez allí, debemos bajarnos en la Avda. Príncipe de Asturias, a la altura del Auditorio Teresa de Berganza. Preguntad al conductor por esta parada.

Desde allí, como hicimos nosotros, puedes bajar levemente hacia la Plaza del Mercado y la calle Carretas, en pleno centro del pueblo, donde puedes tomar un café antes de comenzar el periplo andarín. No dejes de acercarte a la Plaza del Ayuntamiento del pueblo, que es muy pintoresca y bonita. Típica plaza de pueblo castellano.

Plaza del Ayuntamiento de Villaviciosa de Odón

Una vez hecha la pausa mañanera, deberemos buscar de nuevo la plaza del Mercado para desde allí, desde su glorieta a la izquierda, tomar la calle Lacedón, que desemboca en la Avda. Príncipe de Asturias. Cruzaremos esta avenida principal para tomar justo enfrente y por su izquierda, la plaza del Parador. Dejada esta plaza atrás comienza la calle Cueva de la Mora. Seguiremos toda la calle hasta el final, llegando al puente sobre la M-506 que circunvala el municipio. Dejamos ya atrás el entramado urbano y comenzamos con caminos rurales fuera del pueblo y buscando el Pinar, la ruta comienza con una cartel informativo del Parque Regional del Curso Medio del Río Guadarrama, que nos indica varias rutas y que nos sirve para mostrar nuestra posición sobre el mapa.

Antes de seguir camino ya por el campo, os contamos varias curiosidades de Villaviciosa de Odón. La primera es que cuenta con un castillo, que podréis visitar en otra ocasión con más tiempo, y que fue sede de la primera escuela forestal de España.

Castillo de Villaviciosa de Odón

La segunda de las curiosidades, es que Villaviciosa, gracias a su valor ambiental flanqueada por el río Guadarrama, atesora una población muy importante de Cernícalo Primilla, un pequeño halcón que está en peligro de extinción. Gracias al esfuerzo del ayuntamiento, la Comunidad de Madrid y el Ministerio, lleva ya décadas con una población estable, dignas de mención.

Cernícalo primilla (Falco Naumanni).

Existen distintos tipos de cernícalos, pero el primilla es el más vistoso y amenazado. La curiosidad de esta pequeña rapaz es que debe su nombre a su capacidad para "cernirse" sobre sus posibles presas. Es decir, es capaz de mantener el vuelo parado sobre un mismo punto aleteando, sin necesidad de realizar pequeños círculos concéntricos como otras aves rapaces. Una vez localizada su presa, se cierne en picado sobre ella. De ahí su sobrenombre de Cernícalo.

Y dicho esto, retomamos el camino. Una vez superado el puente sobre la M-506. Desde el panel informativo que antes os decíamos, se nos aparece justo enfrente, en el horizonte y hacia el suroeste, el gran silo y el propio pueblo de Navalcarnero. Desde este punto salen dos caminos. Deberemos tomar el de la derecha. Es un camino histórico y vecinal denominado Camino de la Alcantarilla. Caminaremos por él durante un 1 km. aproximadamente, hasta llegar a otro cruce de caminos. Tomaremos de nuevo el camino que sale a nuestra derecha, y que marca un pequeño repechón. Este camino se llama de los Molenderos y es una vía pecuaria con denominación de vereda. Justo arriba del repechón, nos encontramos con el lateral de la Finca ecuestre de La Retienta. Puedes ver los caballos y también unos cuantos burros a tu derecha. Que bonitos y simpáticos son los burros que vinieron a la valla a saludarlos.

Nada más dejar esta finca y haber saludado a nuestro amigos burritos, nos encontramos de nuevo con un cruce de caminos. Hemos ido a parar al Camino de Sacedón, un camino histórico del municipio que forma parte también de la red de vías pecuarias de la Comunidad de Madrid. En este punto giramos a nuestra izquierda y nos incorporamos a la Vía Pecuaria que aquí está señalizada. A 500 metros más adelante y a nuestra derecha, ya podremos encontrarnos con una de las entradas al Pinar de Villaviciosa.

Entrada al Pinar de Villaviciosa

Merece la pena recorrer este simbólico enclave, hoy en día vallado, pues tiene un valor ambiental y paisajístico enorme. En la actualidad se le conoce como El Pinar de Villaviciosa, pero ocupa lo que antes serían los parajes y antiguas fincas del Parralejo y Monreal. Es precisamente aquí donde anida nuestro amigo el Cernícalo Primilla.

Una vez dentro podréis disfrutar de este bosque y recorrerlo como bien os parezca, pero si queréis continuar camino hacia El Sotillo, debéis buscar su lado norte en busca del puente sobre el Arroyo de la Vega, que corre paralelo a la M-501. La famosa carretera de los pantanos. Eso es lo que hicimos nosotros, siguiendo parte de un sendero señalizado dentro de este enclave que nos lleva desde la puerta Sureste del Pinar, en el Camino de Sacedón desde donde entramos, hasta el puente sobre este arroyo con un recorrido dentro del pinar para deleitarse. Si bien es verdad que en su mayoría es un pinar, nos podemos encontrar con rasgos de un dehesa mixta, pues hay zonas con presencia de encinas y alcornoques, y cerca del arroyo con especies de bosque de ribera, como alamos, sauces o fresnos.

Este enclave es uno de los atractivos de esta ruta. Pero para descubrir el otro atractivo, El Sotillo, debemos buscar el puente sobre el Arroyo de la Vega que antes hemos descrito. Tras superarlo, otro repechón importante nos llevará a la pista lateral de la ya también mencionada, M-501, carretera de los pantanos, que la tomaremos girando a nuestra izquierda, como si fuéramos a Brunete y San Martín de Valdeiglesias. Seguimos por esta pista en paralelo a la carretera durante aproximadamente un 1,5 km. En ese momento daremos con una glorieta y puente sobre esta carretera que permite el cambio de dirección y que da acceso en coche a El Sotillo y a la Residencia de Personas Mayores de la Comunidad de Madrid que se sitúa sobre este paraje. Bordeamos la glorieta siguiendo el camino de frente, en paralelo a la carretera actual. Caminamos ahora por lo que antes era el antiguo trazado de la carretera hoy ya en desuso, que en este punto va perdiendo altura y dirigiéndose hacia el río Guadarrama, en otro kilómetro y medio más, aproximadamente.

Cuando nos topamos con el Río Guadarrama, nos encontraremos con el puente de la actual carretera, que nos permite girar a nuestra derecha y pasar bajo él, para en apenas un centenar de metros acceder ya a la zona recreativa de El Sotillo. Allí podremos encontrar mesas y bancos, que a nosotros nos permitió hacer nuestra ya típica parada de almuerzo que siempre hacemos a eso de las 12 de la mañana. Esta parada nos permite reponer fuerzas y charlar una media hora sobre lo recorrido hasta ese momento y sobre el resto de la ruta que queda por hacer.

Debemos hacer una mención especial a que por la insistencia de Carlos Poblete, el Animador Sociocultural que dinamiza este grupo de senderismo, traer una bota de vino como indispensable para las rutas, y sus "amenazas" socarronas de no realizar más rutas si el grupo no lleva un bota de vino. Así que, para llevarle la contraria, en esta ocasión contamos con 2 botas por falta de una. Después de las risas y las bromas, retomamos fuerzas en esta área durante un ratito para retomar el camino.

Retomamos el camino buscando la orilla del Río Guadarrama donde tomaremos lo que es hoy una senda botánica y de fauna de la zona muy ilustradora. Este camino es otro camino histórico y vía pecuaria. La denominada Vereda de las Huelgas. Esta vereda la seguiremos junto al río hasta llegar a la valla del complejo del Club de Golf Lomas-Bosque. La vereda histórica ha sido invadida en este punto por este complejo ya que continua paralelo al río y la valla lo impide. Nosotros continuaremos junto a la valla girando levemente a la derecha, ya alejándonos del río hasta que la senda botánica y de fauna hace un giro, otra vez de derechas, para volver a El Sotillo. Ahí precisamente sale un pequeño camino a la izquierda que nos sacará a la calle Guadiana de la urbanización El Bosque. Hemos caminado junto al río un par de kilómetros entre un bello bosque de galería o de ribera con algún ejemplar de fresno, verdaderamente enorme.

Tomaremos la calle Guadiana hacia la derecha subiendo su cuesta, hasta que confluye con la calle Ebro que igualmente seguiremos hasta el final. Este último tramo de unos 2 kilómetros y medio se hace un poco pesado, pese a que podemos ir entretenidos con fastuosas casas que se nos van apareciendo en ambos lados de la calle. La calle Ebro en su tramo final continua en bajada ya hacia la glorieta que da acceso a esta urbanización. En ese punto aparece un pequeño descampado a nuestra izquierda que atraveraremos transversalmente para dirigirnos hacia la pasarela que salva la M-501 y el Arroyo de la Vega, que por la mañana atravesamos en su recorrido hacia el Guadarrama en el Pinar de Villaviciosa. Esta pasarela nos lleva al antiguo puente decimonónico que servía de antigua carretera de Brunete. Otra preciosidad de puente de hierro forjado y remaches, rescatado para su uso peatonal.

Nos vamos acercando al final de la ruta pues una vez superado el puente entramos de nuevo en Villaviciosa de Odón en el final de la Avenida Príncipe de Asturias. Nada más cruzar el puente nos encontramos con un bellísimo lugar con los Prunos o cerezos silvestres, que reciben nuestra entrada al pueblo con todos sus ejemplares en flor. Una maravilla. Foto de postal.

Teníamos pensado tomar el mismo autobús de vuelta, en la misma parada desde donde iniciamos este ruta junto al Auditorio Teresa de Berganza, en el centro del pueblo. Sin embargo avanzados unos 500 metros, dejando atrás los Prunos en flor, nos topamos con una glorieta y justo enfrente una parada de autobús donde la línea 518, que recorre toda la Avenida Príncipe de Asturias, tiene una parada dirección Madrid. En este punto el grupo decide tomar el autobús y ahorrarnos la pequeña subida de la avenida y como medio kilómetro de ruta. Hicimos bien, porque al ser de las primeras paradas, pudimos sentarnos, ya que según avanzaba por la avenida se iba llenando cada vez con más pasajeros. Así que, tomad aquí el autobús.

Todos ya camino de Príncipe Pío otra vez, damos por finalizada la ruta, no sin antes mostrar el recorrido de nuestra ruta gracias a Fernando Ayuso, nuestro "secretarios del grupo" y un pequeño video. La ruta fue así: